«Dónde estaba mi sangre de horchata ahora».Belén tiene dieciséis años y vive en una casa de locos. Su padre, ya muy mayor y en silla de ruedas, insiste en empezar a organizar la enorme herencia que le corresponde. Su hermano parece saber cosas que a ella le oculta todo el mundo. De su madre ni hablamos: apenas alguna llamada telefónica con mala cobertura y ni una visita desde que, cuando los hermanos eran pequeños, sufrió unepisodio que acabó en internamiento. Y Belén quiere que todo sea normal y seguir el consejo que oye desde niña: «Sangre de horchata, cariño. Pase lo que pase, hay que tener sangre fría».Con ritmo de comedia y aliento de drama, Luisa Castro teje una gran novela sobre la ruptura de una familia y sobre eso que nunca sabremos de los demás: qué sucede tras la puerta cerrada.«Dueña de un misterio que no desea desvelar, Luisa Castro es serena, cálida e inteligente».Belén Fortes, Barcelona ReviewLa crítica ha dicho:«Luisa Castro escribe sin ataduras, sin tabúes».Amalia Iglesias, El Correo Español«Si algo define la escritura de Luisa Castro es su decir sin limitaciones».Antonio Ortega, Babelia El País«Su prosa es herederade su lírica así como de la cinematografía aprendida en la escuela de cine de Nueva York».Gema Lendoiro, La Voz de Galicia«Dueña de un misterio que no desea desvelar, Luisa Castro es serena, cálida e inteligente».Belén Fortes, Barcelona Review«Un relato personal e íntimo, pero también mucho más esperanzador. [...] Una historia así no se inventa, se vive. Después, hay quien, como Luisa Castro, tiene la calidad y sensibilidad literarias para reinventarla, trascender la propia anécdota y contar una historia universal, bella y emocionante, divertida, mágica y real. [...] Una historia sencilla en apariencia, pero que ha sido narrada con la madurez literaria de un maestro».El Mundo(sobre Viajes con mi padre)«Una obra despojada de adornos, que con una eficaz técnica hilvana secuencias de la vida cotidiana».José Manuel Caballero Bonald (sobre La segunda mujer)«Se explica un tipo de maltrato psicológico, muy duro, narrado con una espléndida prosa».Rosa Regàs (sobre La segunda mujer)«De esas historias en las que el escalofrío de la inquietud está presente desde el principio: una obra de combate frente a los prejuiciosy las verdades preconcebidas, que desnuda de apariencias buscadas, pero jamás halladas, a dos personajes demasiado inmersos en sus propios clanes».Jesús Ruiz Mantilla (sobre La segunda mujer)«Con un toque de soberbia y crueldad a veces, pero también con cierta ternura,se imagina [...] un proyecto de convivencia».Rosalía de Frutos, Ojos de Papel (sobre La segunda mujer)